Carlos Corres (Bilbao, 1973) Su exitosa trayectoria no se ha visto exenta de premios y reconocimientos, entre los que destaca la Medalla de Honor en el XIX Premio BMW de Pintura, el Primer Premio del II Certamen Nacional de Pintura Parlamento de La Rioja o el Primer Premio de Pintura del V Certamen de Pintura Deportiva MARCA. A esta prolífica producción se suman sus extensas aportaciones al mundo del arte desde el punto de vista formativo, o como jurado en varios premios y comisario de exposiciones. Ha sido socio fundador de Globartia, empresa dedicada a la creación de Murales gigantes y en la actualidad, desarrolla proyectos tan interesantes como Espacio Mural®, plataforma muralística de creación de murales, “On demand” y Wine Marker®, marca dedicada a unir enología y cultura con eventos y producto, y Food Painting®, que marida arte y gastronomía. Proyecto. Para llevar a cabo esta obra teníamos que hacer un mural y el artista que lo llevara a cabo debía entender a la perfección que en 1 Km de Arte todo se hace de manera participativa. Para conseguir nuestros objetivos de la mejor manera posible se invitó a Carlos Corres. Él tiene una solvencia técnica y artística indiscutible pero además es muy sociable y disfruta compartiendo y escuchando opiniones. Trato Vegetal es el nombre que le dio a la obra desde el principio en el que vio claro que el muro tenía que vestirse de los colores de la tierra y vegetación que rodea Ventosa. Por ello propuso un taller para, que las personas que estuvieran interesadas, pudieran plasmar sus ideas al respecto. Corres trabajó esas propuestas y nos brindó cuatro opciones. La más votada es la que dio paso a la obra final. Proceso. Trato vegetal.
Riojano de adopción y licenciado en Bellas Artes por la Universidad de Salamanca. Artista plástico cuya obra se ha expuesto en diversos países de varios continentes. Explora la realidad creando nuevas formas conceptuales de concebir la imagen a través de una figuración híbrida con la pseudo-abstracción.
“…desde el principio vio claro que el muro tenía que vestirse
de los colores de la tierra y vegetación que rodea Ventosa”